Energías de abril con el Dragón de madera yang.

Este año la gente tiene mucha necesidad de moverse, de comenzar a moverse. Esto se ve con fuerza desde los últimos meses del año pasado,  y está muy bien, debemos movernos. Pero cuidado, porque hay que avizorar qué movimiento es el adecuado y hacia dónde ir.

china, taiwan, chinese lantern festival-1215511.jpg

El Dragón en su mes nos mostrará aquellas cosas que no hemos terminado de ver con claridad. Es un mes en el que tenemos que elegir lo que es verdaderamente prioritario, desde la sinceridad de lo que realmente podemos realizar, concretar, mantener.

Este año vamos a ver todas los posibilidades que tenemos al frente, todas las cosas que podemos concretar, que podemos alcanzar, que podemos consolidar; pero eso no significa que podamos lograrlas todas este año.

Es un momento idóneo para centrarnos y buscar dentro de nosotros. Ver si eso que tanto proyectamos como un camino, un proceso, una meta, un sueño,  es lo que realmente queremos hacer y lo que realmente podemos hacer, quizás no lo sea, o quizás no sea el momento.

Este año es el indicado para comenzar a hacer cambios, cuyos frutos veremos mucho más adelante y hay que hacerlos, hay que iniciar ya para verlo en el futuro. Pero este mes, nos detiene para que nuestros pies toquen tierra y nos permita ver desde lo que es real, para no seguir avanzando en algo que posiblemente no es pertinente.

Esa realidad incluye mi falta o no de merecimiento. Tanto para aquellos que se sacrifican por todo y por todos, sin recibir nada a cambio. Como aquellos que creen merecerlo todo, pero no han construido para que así sea. Ninguna de las dos posturas ayuda a construir sueños ni son sanas. Es un mes para que ver en qué y hasta donde nos hemos auto engañado.

Recibir no tiene nada de malo, pero a veces también esperamos recibir sin haber entregado nada, o aspiramos recibir algo distinto a lo que hemos entregado. Nos puede pasar en diferentes áreas de nuestra vida, y no nos damos cuenta de ello. Por eso es importante, mirar, mirarnos. No dejes de hacerlo, es la única manera que dejes de engañarte, de acusarte o de distraerte.

Es un mes que también nos recuerda la importancia y necesidad inherente que tenemos de jugar, de recuperar esa magia y fantasía que tenemos todos, de niños, pero que vamos perdiendo en nuestro camino condicionado. Mejor jugar, que seguirnos haciendo daño. Jugar recordando que lo hago para disfrutar, pierda o gane, para disfrutar; no para competir, que es lo que más nos daña. Jugar es sanador, porque nos recuerda esa magia y fantasía que llevamos dentro.

Recuerda hacer caminatas cortas, por relax, si es en un parque mejor, o hacer Qi gong, Tai chi, yoga o bailar. Cuida la alimentación del exceso de grasas, de abusos del café o chocolate, quesos y otros lácteos. Prioriza dormir antes de las 10:30 p.m.  Te ayudarán a prevenir dolores de cabeza, insomnio, pesadez en el cuerpo, adormecimiento de miembros, dolores musculares y tendinitis. Prioriza lo verde este mes.

Cuídate también de la ira, de la nostalgia, de no quedarte atrapado en tus pensamientos, de sentirte Anita la huerfanita. Disfruta el día a día a plenitud, agradeciendo cada uno de sus instantes. Busca la magia que hay en cada momento.

Idúwali Nali.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *